Reconozco que me siento mucho más cómoda trabajando para fiestas infantiles, pero lo cierto es que en esta boda me lo he pasado en grande.
Cuando se busca una temática para la decoración de una boda hay miles de temas posibles que pueden representar los gustos de los novios. Uno de los temas que más gustan a la hora de buscar un hilo conductor es la temática de los viajes.
Se puede enfocar de muchas formas: El viaje de novios, los viajes que han hecho durante su historia como pareja, los lugares que se quieren visitar algún día o incluso la historia de la pareja si es que son de nacionalidades distintas.
Ángel y Nuria lo tenían muy claro desde el principio, y querían mostrar en la decoración de su gran día los lugares en los que habían estado juntos. Además querían darle un toque vintage al conjunto y que todo tuviera un mismo estilo.
Preparamos para ellos un bonito rincón en el jardín donde se celebraría el cóctel de bienvenida. Al ser una boda de verano, los invitados empezarían a llegar al jardín cuando el sol ya estuviera bajando, para en un rato, terminar con la iluminación de noche.
Entre dos árboles colocamos un bonito fondo con lucecitas y unas guirnaldas larguísimas con papel de mapas que sirvieron de photocall. Además colocamos allí mismo una mesita con una cámara Instax y algunos detalles más para que los invitados pudieran hacerse fotos y después pegarlas en su álbum de firmas y recuerdos.
Una vez dentro colocamos una mesa grande con todo el sitting plan, para indicar a los invitados en qué mesa debían sentarse. Para este montaje utilizamos unos paneles de madera con malla de gallinero forrados con tela en crudo y una maleta de madera, en los que pusimos todas las tarjetas con los nombres.
Además completamos la presentación con algunos objetos de aire vintage y un montón de etiquetas antiguas.
Pero eso no fue lo único que preparamos para ellos: Una mesa para los regalos y algunas chuches y dulces para la hora del baile, en la que también extendimos el motivo de los mapas y los aviones. Preparamos unas chocolatinas personalizadas que por lo que nos han contado literalmente ¡Volaron!
Desde luego las bodas han cambiado, y ahora el carácter y los gustos de los novios se pueden reflejar claramente con cada detalle.
¡Enhorabuena chicos! Ha sido un placer trabajar para hacer este gran día un poquito más especial (si se puede).