Hoy toca tutorial. Una idea la mar de sencilla y resultona para un cumpleaños o fiesta infantil.
Queríamos felicitar a Carmen de MiLowCost por su cumple blog, y para ello ha pedido a sus seguidores que compartan una foto en Instagram con un sólo requisito: Que aparezcan dos conejitos blancos en ella (No os perdáis el súper sorteo que está realizando porque es una maravilla).
Me apetecía hacer algo especial, y me acordé de que tenía un proyecto casero a medias desde hacía un tiempo así que junté las dos ideas y aquí estamos para enseñaros cómo ha quedado.
Es un tutorial súper sencillo para hacer unas orejas de conejito como complemento de un disfraz o para acompañar la temática de un cumpleaños infantil, por ejemplo. Se trata de un lazo largo anudado en la cabeza con los extremos más largos de lo normal que al atarlos quedan así de graciosos, simulando unas orejas de conejo.
Para poder darle forma a las orejitas y que se mantengan estiradas tenemos que colocar un alambre dentro antes de terminar de coserlo. Así podemos ponerlas a nuestro gusto y moldearlas con la forma que más nos guste.
Para hacer las orejas de conejo necesitarás:
- Tela estampada y/o lisa (detallo medidas más abajo).
- Tijeras.
- Aguja e hilo o máquina de coser.
- Un lápiz.
- Alambre fino, fácil de modelar.
En este caso hice dos medidas diferentes, una para mí más ancha y más larga y otra para Lucía, tamaño bebé.
Las medidas usadas para adulto son aproximadamente 110 x 7 cm , que al coser quedarán en aproximadamente 108×5 cm.
Las medidas para las orejitas de conejo para bebé son aprox 92×5 cm, que al coser quedarán en 90×3 cm.
Estas medidas son aproximadas porque puedes hacerlas del largo que más te guste. Para la mía usé el ancho de la tela que tenía y para Lucía medí con el metro el contorno de la cabeza y después dejé un palmo más por cada oreja.
Necesitaremos 2 tiras de tela iguales o distintas (para mí usé las dos de la misma tela y para Lucía usé una tela estampada y otra lisa).
Las colocaremos una contra otra dejando el estampado por la parte interior, y dibujaremos con un lápiz la silueta de las orejas. En mi caso simplemente he terminado los extremos en pico, un poco redondeado para darle forma.
Después cosemos todo el contorno dejando un trocito pequeño abierto. Una vez cosido, le damos la vuelta a la tela.
Con un trozo largo de alambre hacemos la forma de la oreja y lo metemos por la abertura que nos queda en la tela. Lo introducimos hasta los extremos y moldeamos con la mano para que ocupe la punta con la forma deseada. Ten cuidado de proteger los extremos del alambre doblándolos y cubriéndolos con celo o cinta de pintor, para que no pinchen a los peques.
Una vez esté dentro, termina de coser el agujerito de la tela que nos falta y ya están listas para anudar y colocar.
Un truco: No tienes que rellenar todo el interior de la cinta con alambre. Yo sólo coloqué alambre en los extremos para que al anudarlo en la cabeza de la peque no tuviera nada duro en la nuca, sino sólo en la zona del nudo y hacia los extremos (las orejas). Al ser un alambre blandito puedes moldear las orejas una vez tenga la cinta puesta y así es mucho más fácil y cómodo.
Tomé la idea del blog Hause that Lars Built que hizo con dos telas lisas de distintos colores y la verdad es que quedó tan gracioso que quise probar.
Si quieres también tienes esta otra versión para adultos que me ha parecido espectacular para un disfraz de pareja.
¿Te animas?