Hay veces que conectas. Conectas de una manera maravillosa y sin darte cuenta estás tan cómoda como si te conocieras de toda la vida, y pasas horas intercambiando ideas e ilusionándote más de lo normal (si se puede) y disfrutando cada detalle como nunca.
Es una confesión que os hago y es que preparando la comunión de Blanca ha sucedido eso. Y es que pasamos semanas preparando y diseñando todos los detalles de la celebración con su madre, y sintiéndonos una más de la familia.
El día de la comunión de Blanca el cielo estaba oscuro oscuro, y nos desafiaba a cada momento, con esa brisa intensa que aparece justo antes de la gran tormenta, así que tuvimos que cambiar los planes en el último momento y trasladar todo el montaje de la mesa de dulces, la decoración y todos los demás detalles a una zona cubierta en el porche de la casa.
La mesa de dulces que en un inicio estaría en pleno jardín y con un precioso árbol de fondo al final tuvimos que colocarla bajo techo delante de una pared de color amarillo intenso. La primavera es lo que tiene, que te hace cambiar de planes en minutos. Pero aun así creo que todo quedó muy bonito y vistoso y lo disfrutaron mucho.
Para el diseño de los cartelitos y otros adornos utilizamos nuestro diseño de flores que puedes encontrar en la shop como guirnalda, aunque podemos adaptar otros elementos decorativos para que puedas decorar tu fiesta con el mismo estilo.
Además de la mesa de dulces con aire rústico pero romántico, preparamos un montón de detalles de decoración para ambientar todo el jardín y darle un toque festivo: Guirnaldas, pompones de papel, bolas de nido de abeja y un montón de adornos para montar unos bonitos centros de mesa.
Murphy además de amenazar con la lluvia constantemente también decidió que mi cámara no tenía el día, así que terminé haciendo todas las fotos con el móvil y para colmo me dejé sin sacar un montón de detalles que me habría encantado poder fotografiar (disculpad por las fotos, hice lo que pude..)
Para los centros de mesa preparamos unos pequeños conjuntos con rodajas de madera, tarritos con flores, botellas decoradas con etiquetas y toppers y casitas de pájaros. Además en la mesa de los niños hicimos unos marcasitios con palitos de madera y cordón rústico que quedaron la mar de chulos colocados en las servilletas. Así todos sabrían dónde tenían que sentarse.
Aunque estábamos casi seguras de la lluvia decidimos mantener la decoración del jardín con una guirnalda de más de 20 metros de banderines en tonos rosa, vainilla y mint con distintos estampados y varios grupos de pompones y bolas de nido de abeja (las fotos no le hacen justicia). ¡Ah! Tengo que decir que al final no llovió 🙂
Y además de todo esto preparamos una mesa para el libro de firmas, en el que colocamos también un montón de chocolatinas personalizadas, unas bandejas con chuches y los recordatorios junto con algunos regalitos para sus amigos.
Muchas gracias María José por confiar en nosotras y dejarnos formar parte de este día tan especial. Ha sido todo un placer estar con vosotras y planear juntas cada detalle.
Y a vosotras ¿Qué os ha parecido? Sed buenas que ya se que el reportaje es un poco puag (tengo que perfeccionar mi técnica con el móvil para cuando me surgen estos imprevistos…)
¡Feliz inicio de semana!